Quiero estar a solas...[alexander]

Acabé llegando al castillo en mi carrera por salir del Bosque Prohibido; desde entonces una mezcla de horribles sentimientos estaban en mi pecho....confusión primero,miedo después...cuando llegué al castillo,se se agolpó mi pena,y las lágrimas que había caído anteriormente volvieron a surgir por mis mejillas.
Seguía corriendo por los pasillos,chocándome con alumnos que me miraban como si estuviera loca.Solo quería desaparecer...
Llegué hasta las mazmorras y,en cuando llegué a un rincón oscuro de aquel tenebroso lugar,caí al suelo abrazando mis piernas con mis brazos,llorando con todas mis ganas.
¿Por qué me pasaba esto?Estábamos tan bien...y de repente...
Escondí la cabeza entre las piernas,sin querer pensar en eso.

El sonido de unos pasos retumbó en las paredes húmedas de las mazmorras;elevé un poco la cabeza para encontrarme con la persona a la que menos quería ver y a la que,a la vez,me encantaba tener cerca.
Cuando se dio cuenta de mi presencia cambió el rumbo de su camino hasta su sala común.
-¿Huyendo de mi?-dije con la voz todavía temblorosa por el llanto; me fijé que iba lleno de sangre...¿qué habría hecho...?

-El primero que se acercó a mi fuiste tu,tienes la culpa.-dije controlando el hipo de haber llorado,intentando que en mi voz se notara enfado.-A parte del hecho de ser un vampiro,¿por qué quiere matarme después de lo que hiciste?-fui directa al grano,levantándome poco a poco hasta estar erguida y apoyada contra la pared,secándome algunas lágrimas de las mejillas con la manga de la
túnica.

Me mordí el labio inferior con fuerza,con ganas de darle un buen golpe,aunque me hiciera daño yo misma; el pecho me dolió como si me hubieran clavado una daga.
-¿Algo entretenido con lo que pasar un rato?-repetí sus palabras,llena más de pena que de otro sentimiento hostil.Maldita sea...esto mw pasa por besarme con un vampiro en medio de un bosque nada más conocerle...-No tenía que ni siquiera haberme acercado a ti...ya decían que este bosque estaba plagado de monstruos.

-Podría seguir así eternamente,pero dado que parece que ni tienes sentimientos,sería una estupidez seguir.-dije enarcando una ceja.Tenía los ojos rojos,pero las lágrimas desaparecieron; acostumbraba a ser fuerte y no débil,por lo que me recuperaba enseguida...al menos por fuera,como en este caso.Por dentro me dolía absolutamente todo...

-Lo siento,pero no voy a cambiar lo que he dicho.Pégame,haz que me desangre...pero no cambiaré nada.-dije manteniendo mi posición;sé que había sido un golpe bajo decir eso,ya que no sabía nada de él y eso podía dolerle,pero yo también estaba dolorida.

Corrí por las mazmorras, había visto a Lestrange entrar y de él no me fiaba un pelo.
-¡Expelliarmus!-grité apuntándole en cuanto llegué, y se le cayó la varita a un kilómetro de distancia-¿te ha echo algo ese... vampiro, Mel?

Me quedé a cuadros cuando apareció Harry;habíamos hablado varias veces por los pasillos...¿le acababa de lanzar un hechizo?Mandó a Alexander contra una pared de piedra,que se resquebrajó por el golpe.Me encogí de hombros ante el ruído.
-No,no me hizo nada...-miré a Alexander con tristeza,y luego a Harry de nuevo.-Por favor,no te metas...no tenías que hacerlo,sé cuidar de mi misma.

-lo sé Mel, ¡y tú bicho asqueroso, cuando quieras alimentarte, le pides a Hagrid un chuletón repleto de sangre!-le grité al monstruo-Mel ¿seguro que estás bien? pareces a punto de llorar, vámonos, antes, de que se levante y te haga daño.

Miraba a Alexander sin decir nada,no podía decirle nada...
Cuando sus palabras sonaron en mi mente fue como si me dieran una patada en el estómago,haciendo una mueca de dolor.Levanté la mano hacia él....pero la bajé al instante.
Qué tonta fui al pensar que alguien así podría sentir algo por mi...y que tonta he sido al permitirme sentir algo por él.
-Harry...siento que tengas que oír esto,lo siento...-dije sin mirar a Harry,con voz ahogada.

-Ah...no importa Mel-dije abrazándola por la cintura y acariziando su cabello con la mano libre-es un idiota, me llama sangre sucia cuando mis padres son magos y yo mestizo, la familia de mi madre era muggle. ¿Quieres ir a la sala de los menesteres con migo? Allí estaremos calentitos y no nos molestará nadie. Te ofrecería mi dormitorio, pero no puedes entrar donde los Griffindors ¿no?

Me encogí de hombros.
-Como tu quieras...y no,no puedo entrar en la sala común de Griffindor,y menos todavía en los dormitorios de los chicos de allí.-reí por lo bajo.-Pero bueno,vamos.
Ahora mismo,lo único que necesitaba era irme lejos de este sitio,de todo....